Miles de manifestantes contra Bush en Alemania
Miles de manifestantes protestaron hoy en Maguncia, Sudoeste de Alemania, contra la visita del presidente estadounidense, George W. Bush, a quien calificaron de "guerrerista" por su política agresiva y enemiga del ambiente, informó ANSA.A dos años de la gran movilización popular contra la guerra en Iraq, los alemanes volvieron a salir a las calles para rechazar la intervención armada norteamericano-británica en ese país que llevó a la muerte y a la destrucción, al aumento del odio y del terrorismo.
Bush llegó a Maguncia en su afán de que los europeos compartan los gastos de la ocupación de Iraq y se subordinen a la política de Washington en otras partes del mundo.
"Bush, el terrorista número uno", "Iraq, un nuevo Viet Nam", "No a la guerra por una falsa libertad", "Bush, señor de la guerra, que se vaya a casa" son algunos de los eslóganes antinorteamericanos escritos por los manifestantes de Maguncia en carteles y pancartas.
En la capital de Renania-Palatinato casi desierta, blindada y transformada en una suerte de búnker por las extraordinarias medidas de seguridad, los pacifistas se reunieron y recorrieron los lugares que visitó Bush.
Miles de agentes de los cuerpos especiales en total estaban de servicio casi 10 000 contuvieron a los manifestantes.
Por su parte, la norteamericana AP reconoció que las palabras pueden haber sido conciliatorias, pero muchos europeos consideran que, en el fondo, los Estados Unidos no han cambiado su actitud hostil hacia el Viejo Continente.
Los europeos son renuentes en aceptar el concepto que parece dominar los discursos de la secretaria de Estado Condoleeza Rice y el propio Presidente: que los Estados Unidos desean ser los policías del mundo y esperan la ayuda de Europa para derrocar todos los gobiernos denominados por ellos tiranías.
En este momento, los Estados Unidos necesitan al Viejo Continente para resolver los conflictos en el Oriente Medio, particularmente en Iraq, dijo Emmanuel Rozo, de 29 años, empleado de una empresa de comunicaciones en París.
Los aleados de esta parte del mundo reaccionan con reticencia a la idea de lanzarse a una cruzada para "propagar la democracia", como quiere Washington. Algunos no comparten la opinión de que la democracia es un remedio que lo cura todo, otros no consideran que deba ser exportada y también hay quienes creen que no es otra cosa que un disfraz político bajo el cual se ocultan otras intenciones.
Aunque Bush y el canciller federal de Alemania, Gerhard Schroeder, consideran que las diferencias son cosas del pasado, y el Jefe de Gobierno de Berlín afirmó que mantendrá la colaboración en Iraq, insistió en que su país está dispuesto a "asumir" las responsabilidades que le corresponden en el mundo, pero también "la Unión Europea ampliada demuestra más responsabilidad en cuestiones de paz, desarrollo y estabilidad".
Desde Alemania, señala ITAR-TASS, el mandatario norteamericano se trasladó a Bratislava, la capital eslovaca, donde mañana (hoy) sostendrá un encuentro con el presidente ruso, Vladimir Putin.
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